Hace ya varios años me regalaron una cesta con flores artificiales. Con el tiempo las flores se deterioraron, de modo que decidí utilizar la cesta y tirar las flores. Sin embargo, estaban sujetas en una pequeña maceta redonda de porcelana blanca, que me parecía bonita como para desecharla, así que pensando, pensando, decidí reconvertirla en una bombonera.
Para ello compré unas calcas vitrificables para porcelana, que semejaban fotogramas de películas antiguas. Venían en una sola tira, de modo que las fuí cortando una a una y eligiendo las que más me gustaban. El siguiente paso fue meterlas en agua no muy fria, y dejarlas hasta que veamos que las dos capas que cubren el dibujo, superior e inferior se van desprendiendo.
Sacamos la calca, la secamos con un papel de celulosa, y procedemos a pegarla sobre la porcelana como más nos guste. Yo las fuí poniendo todo alrededor, unas rectas, otras inclinadas...Una vez pegadas hay que dejarlas secar un par de días.
Cuando esté bien seco, y veamos que al tocar las calcas estas no se mueven, metemos la pieza al horno, previamente calentado a unos 130-140ºC y la dejamos una media hora. Abrimos el horno sin tocar la pieza y la dejamos enfriar un poco, porque de lo contrario nos estallaría. Una vez fría ya la podemos retirar.
Para darle un remate final, le fuí aplicando un marco con un poquito de relieve a cada una de las calcas, mediante un "tulip" negro y a mano alzada. Dejamos secar al aire durante un día, y ya tenemos la bombonera lista para llenarla de caramelos, bombones...
Aquí os dejo unas fotografías de las calcas con más detalle. Espero que os guste!!
Que bonita la bombonera, es preciosa, me gusta tambien como joyero, para guardar pendientes o collares pequeños. Es genial. Besos
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