Hola a todos! Termina el mes de Febrero, y lo hace con un nuevo reto, en esta ocasión, el "Reto Amistoso nº 98", organizado por Mariela, autora del blog "Inspirada por mis Amores".
Como anfitriona, Mariela nos ha propuesto el tema: "Mini Mundo, Vida en miniatura", lo cual supone un gran desafío, pues aunque no lo parezca, no es nada fácil crear cosas pequeñitas. No obstante me animé a participar con mucho gusto, y aquí está mi humilde aportación, una "mini alacena" de madera para colocar algunas "mini piezas" y decorar un poquito la cocina. Espero que os guste!
Veamos cual ha sido el proceso de realización. Partimos de una alacena de madera en miniatura, comprada en un bazar, que en primer lugar deberemos someter a un buen lijado, para que la superficie nos quede lo más lisa posible, sin aristas ni imperfecciones (aunque algunas que vienen "de fábrica" no se nos van a ir, como algunos defectillos asociados al encolado que hayan usado).
Lo que estaba buscando era conseguir un aspecto de madera de roble, de modo que lo primero que hice fue fabricarme un tinte casero, con pintura acrílica de dicho color muy rebajada con agua, y aplicarlo en el sentido de las vetas de la madera para que estas fuesen visibles.
Una vez el tinte hubo secado, utilizando una plantilla también muy pequeñita con motivos florales, empecé a realizar el estarcido, primero en los laterales, y por último en las dos puertecitas. En este caso utilicé un pincel de estarcir, pintura acrílica color verde para las hojas, y pintura acrílica color vainilla para las flores.
Como podéis ver, se aprecian muy bien las vetas de la madera, pero el aspecto es aún un poco artificial, de modo que para conseguir un acabado de mayor calidad, apliqué una generosa capa de betún de judea mezclado con cera, dejándola actuar unos minutos, y retirando con un paño seco. De esta manera, además de conseguir el color que estamos buscando, vamos a nutrir la madera confiriéndole mayor protección.
Mientras esperaba a que secase, recorté un trozo de cartulina color ocre, para pegarlo con cola blanca en la base de la mini alacena, pues quería colgarla en la cocina, y de esta manera consigo un mejor acabado. Una vez pegada, pinté el borde con betún de judea sin diluir.
Y así la tenemos lista para colgar, utilizando simplemente unos trocitos de cinta adhesiva de doble cara. Aquí tenéis el resultado final; nuestra alacena en miniatura parece ya de auténtico roble!
Bueno, ya sólo nos queda dar el toque final, para lo que vamos a utilizar unas piezas de cerámica, por supuesto en miniatura, que llevan conmigo muchísimos años (algunas incluso están algo deterioradas, pero fueron regalos de mi abuela, de mi madrina...y por ello tienen un gran valor sentimental).
No me digáis que no lucen bonitas en nuestra alacena en miniatura!!
Bueno, pues con un elemento tan sencillo y un poquito de paciencia, hemos conseguido un adorno original y alegre para nuestra cocina. Espero que os haya gustado, y como os decía, con esta entrada participo en el RETO AMISTOSO Nº 98
Y esto es todo lo que quería compartir hoy con vosotros. Me despido como siempre dando la bienvenida a las nuevas seguidoras que espero pasen por aquí ratitos muy agradables, compartiendo nuestras aficiones. Y por supuesto, agradeciendo de corazón todas vuestras visitas y cariñosos comentarios, que como siempre digo son el motor de este pequeño rincón.
Os deseo a todos muy feliz semana.
Un Abrazo y Sed Felices!